Muriendo destruyó nuestra muerte, resucitando restauró la vida.
Preguntado San Buenaventura de dónde sacaba tan copiosa y excelente doctrina como ponía en sus obras, dijo mostrando un crucifijo: "Este es el libro que me dicta todo lo que escribo. Aquí he aprendido lo poco que sé". (San Alfonso María de Ligorio)
Ideal para colgar en la pared como ayuda para recordar el gran amor de Jesús por nosotros.
Crucifijo tallado completamente en madera
Pintado a mano
Hecho en Italia
Medida 13 cm
Objeto hecho artesanalmente: es normal que el producto presente ligeras diferencias con respecto a la foto que no deben entenderse como defectos, sino como un signo de la autenticidad del producto.
share
Compartir
Esta sección no tiene ningún contenido en este momento. Agrega contenido a esta sección utilizando la barra lateral.